
Mathyas y el tesoro que descubrió en la Sala LabCo de Bosa
Por: Julián Gómez Mejía
A la Biblioteca Pública Bosa varios niños entran de prisa. A veces se les olvida dejar el equipaje en los casilleros. Generalmente, no titubean para dirigirse a donde casi siempre quieren llegar, la Sala Infantil. Es el caso de Mathyas, que cuando va llega directo a esta zona de la biblioteca, ubicada al lado de la Sala LabCo.
En Bosa, esta sala representa mucho para la comunidad y recientemente para la niñez con sus talleres, retos creativos y laboratorios de co-creación . Mathyas tiene 4 años y cuando habla con adultos da respuestas muy cortas con las excepciones de su mamá Julieth y de John Vela, uno de los profesionales mediadores de las actividades de las Salas LabCo. Con los demás niños suele ser más extrovertido.
¿Cómo Mathyas se enamoró de la Sala LabCo?
Hace unas semanas, Julieth indagó sobre las actividades de las Salas LabCo. Ella siempre creía que eran un espacio diseñado y equipado para adolescentes y adultos. La primera sala que conoció fue la que está ubicada en la Biblioteca Pública Gabriel García Márquez - El Tunal y sacó en préstamo un libro de experimentos para su hijo. Después fue a la sala de la Biblioteca Pública Manuel Zapata Olivella - El Tintal, donde armó con él un avión en Lego. Sin embargo, su percepción cambió cuando conoció la LabCo de la Biblioteca Pública Bosa.
Foto: Julián A. Gómez Mejía @juliangmejia1
“Una prima de Mathyas que vive cerca me comentó de una actividad para los niños. Lo llevé y aquí me gustó porque el espacio es muy integral. Entonces, cuando vi el taller de LabCo pensé que no le iba a gustar, pero investigué, revisé la programación, estuvimos en la primera sesión y seguimos asistiendo”, explica Julieth.
Mathyas no olvida esa jornada, fue la primera vez que pudo interactuar con un microscopio digital en el marco del laboratorio de co-Creación ‘Exploración con los sentidos’. Este es uno de los laboratorios de co-creación que se están realizando en las Salas LabCo. Se diseñó como un espacio intergeneracional para la infancia y sus cuidadores, que se enfatiza en explorar nuestro entorno y los seres que lo habitan con nuestros sentidos utilizando las herramientas de la Sala LabCo.
“Yo vi vidrio por el microscopio. También una araña y nos asustamos mucho. Si tuviera el microscopio ahora me gustaría ver un libro más de cerca”, dice Mathyas, que también vió cáscaras de duraznos y tomó pantallazos de lo que logró observar con el microscopio digital.
En cada sesión, los niños y niñas interactúan con elementos que tienen diferentes texturas y en una de las jornadas pudieron explorar con las plantas de la huerta bibliotecaria. “Vimos una planta de cebolla y otra de apio, pero la que más me gustó fue la de apio”, señala Mathyas. Ese día, por medio de un ejercicio de escritura, cada participante describió a su manera lo que había percibido.
A través de ejercicios de observación y registro, las familias participantes tuvieron la oportunidad de observar y manipular diversos elementos naturales, incluyendo la huerta bibliotecaria. Prensaron hojas, probaron frutas frescas y establecieron conexiones entre las distintas percepciones sensoriales: desde la textura de las plantas hasta los sonidos del ambiente, pasando por la composición visual de las hojas y la sorpresa de los sabores. Esto permitió a los participantes reflexionar y experimentar sobre cómo los elementos naturales pueden estar interconectados a través de sus características sensoriales.
El resultado de esta exploración colectiva fue la creación de un "Herbario Sensorial", un gabinete que recoge los hallazgos, anotaciones y caracterizaciones de los elementos observados y manipulados. Cada elemento fue analizado desde una perspectiva visual, táctil y sonora, generando una rica documentación que resalta las relaciones entre la naturaleza y la percepción humana. El herbario no solo refleja la diversidad de la huerta y su entorno, sino que también representa la colaboración de todos los participantes, quienes construyeron un archivo sensorial que invita al redescubrimiento de los recursos naturales que hacen parte de nuestra cotidianidad.
Las Salas LabCo como un espacio familiar
El taller duró ocho sesiones donde comprendieron más de cerca el mundo que les rodea analizando sus interacciones con las luces, los sonidos, los sabores y las texturas. Julieth está a la espera de las siguientes actividades en la Sala LabCo en la Biblioteca Pública Bosa, que se ha convertido en la segunda área favorita de Mathyas, después de la Sala Infantil.
“Los dos no habíamos tenido la oportunidad de participar así en un taller, porque había otros para mí, pero yo sola no me animaba. A mí me motiva más traerlo a él a que participe y esta ocasión fue perfecta para los dos. Nos gustó y voy a tratar de mirar más talleres para él”, dice Julieth.
Foto: Julián A. Gómez Mejía @juliangmejia1
Cuando le preguntan a Mathyas qué quiere ser cuando sea grande, duda un poco y responde que quiere ser más inteligente. Por último, él se anima a dejarle un mensaje a los demás niños que no frecuentan los espacios bibliotecarios: “A los niños les digo que vengan acá a las bibliotecas a armar rompecabezas conmigo”, concluye mientras intenta terminar armar uno sobre los departamentos de Colombia.
Julieth también quiere dejarle un mensaje a los papás para que disfruten otros espacios de las bibliotecas como las Salas LabCo: “Les digo que aprovechen lo máximo que puedan, porque son espacios que ayudan a las familias y al desarrollo de los niños. A veces uno tiene a los niños encerrados en la casa, se aburren y se ponen a ver televisión, pero estos son espacios geniales para sacarlos de ese aburrimiento y de las pantallas”.
Foto: Julián A. Gómez Mejía @juliangmejia1
Actualmente, BibloRed cuenta con cuatro Salas LabCo ubicadas en la Biblioteca Pública Gabriel García Márquez - El Tunal, Biblioteca Pública Manuel Zapata Olivella - El Tintal, Biblioteca Pública Bosa y el Centro Felicidad Chapinero. Anímate y consulta la programación de cada sala en la sección de eventos de www.bibloRed.gov.co.