Fotos y texto por Daniela Monsalve M. 

No es casualidad que, desde temprano, Óscar Wills se encuentre en la sala general del segundo piso de la Biblioteca Pública Las Ferias. Suele ubicarse en un puesto cercano a los libros, junto a la hemeroteca o cerca de la sala de internet, siempre acompañado de sus cuadernos para tomar apuntes, un periódico o una revista, audífonos y un computador portátil.

“Vengo aquí porque uno debe buscar amigos que lo edifiquen, que lo construyan, que lo hagan crecer. Acá encuentro a mis amigos: los libros”, afirma Óscar, quien es testigo de la transformación que ha tenido la biblioteca desde hace más de diez años y la visita constantemente desde hace año y medio.

Para él, las bibliotecas no son espacios ajenos. Desde niño recuerda que su padre lo llevaba, junto a su hermano mayor a una biblioteca del centro de la ciudad. Hoy, como usuario frecuente de la Biblioteca Pública Las Ferias, encuentra en ella un lugar propicio para trabajar, estudiar de manera autónoma e informarse.

Cada mañana, al llegar, lo primero que hace es recoger el periódico, luego solicita en préstamo un portátil y se sumerge en su rutina de aprendizaje: ver videos en inglés para mejorar su comprensión auditiva y preparar las clases privadas de inglés que dicta en las tardes. Además, se desempeña como coordinador de pruebas escolares, lo que lo ha llevado a recorrer diferentes zonas de la ciudad y municipios cercanos.
 

Óscar también solicita libros en préstamo y comparte lecturas con sus estudiantes. “Me apasiona la tecnología, pero soy más amigo del libro físico: lo toco, lo huelo, reflexiono, viajo, navego, me siento libre, para mí es una sinfonía”. Constantemente toma notas de lo que lee en el periódico, de sus clases de inglés o de los libros que consulta. Gracias a estos recursos ha explorado temas como la musicoterapia, la terapia de escritura y la terapia de escucha.

Entre sus diversas recomendaciones destacan ‘Meditaciones’ de Marco Aurelio, ‘Yesterday’ de The Beatles, ‘2001: Odisea del espacio’ de Stanley Kubrick y la serie ‘Adolescencia’, que sugiere especialmente para los jóvenes.

Hablar con Óscar es adentrarse en una vida atravesada por la resiliencia, la música, los idiomas, el autoaprendizaje, la lectura, su madre centenaria, la actividad física y una relación de pareja feliz. Pero, sobre todo, es encontrarse con la tranquilidad y gratitud con la que expresa su forma de ver la vida a sus 67 años. “Una cosa que hago todos los días es dejar mi pasado; hago el esfuerzo de vivir el ahora y el aquí con intensidad. Hoy busco mucho mi paz interior”.
 

“Un espacio como la Biblioteca Pública Las Ferias es importante porque enriquece y ayuda a construir sociedad”, concluye.